Los indicadores económicos evidencian que, desde 1994, América Latina se convirtió en el destino principal de las inversiones directas de las compañías españolas más relevantes en el ámbito de servicios en sus estrategias de globalización.
En un periodo corto, España logró alcanzar posiciones de liderazgo en algunos de los mercados más significativos de Latinoamérica. Como consecuencia, durante el periodo de 1991 a 1999, la inversión en América Latina alcanzó casi 50.000 millones de dólares.
Importancia creciente
Es un hecho claro que las compañías españolas han evolucionado de ser inversionistas marginales en el contexto internacional a poseer una importancia creciente en el sector de los servicios. De esta manera, mientras varias de las corporaciones transnacionales más influyentes a nivel mundial intentaban mejorar su eficiencia mediante inversiones en España, las firmas españolas buscaban ingresar a los mercados de América Latina.
Contaban con el objetivo de aumentar su tamaño y competir, en condiciones más favorables, con empresas líderes en mercados internacionales cada vez más globalizados.
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