Los flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) y su influencia en la economía de una nación o región son objeto de estudio por parte de quienes diseñan políticas públicas. En Colombia, un marco regulatorio promueve la captación de inversores internacionales, el cual ha evolucionado conforme a las demandas del comercio global.
Bogotá, la capital del país, se resalta como la ciudad que captó la mayor cantidad de IED entre 2008 y 2018, alcanzando una suma de US$23.700 millones.
Efectos de la inversión
Estas inversiones provienen de diversas naciones y se orientan hacia sectores clave de la economía.
Los resultados para la urbe son favorables en cuanto a la creación de empleo y el aumento de la competitividad en sus empresas. Por ello, es fundamental continuar la búsqueda de nuevos inversores para posicionar tanto a Bogotá como a Colombia entre los principales receptores de IED en América Latina.
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